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PAREJA: Artículo
El Hombre de tus
Sueños
No lo conoces, nunca
has hablado con él, él ni sabe que existes, pero tú te derrites cada vez que
piensas en su nombre o en su imagen, y sueñas todos los días con él.
Nada
que hacer, no hay salida. Tienes un amor platónico. Todas hemos pasado por eso,
el sentimiento lo conocemos, y aunque se sufre bastante tiene su encanto.
Dentro de estos
"amores platónicos" se coloca el profesor, el jefe, el amigo al que
no le queremos confesar nuestros verdaderos sentimientos o yendo más lejos, ese
"enamoramiento" que sentimos por Brad Pitt o Pierce Brosnan, que
definitivamente están fuera de nuestro alcance.
Cuando sufrimos este
fenómeno, el mundo da vueltas y pasamos fantaseando o soñando despiertas.
Imaginamos que nuestro hombre ideal nos visita, baila con nosotros, nos besa, nos
regala flores, cumple todas nuestras expectativas, y en fin, es perfecto... ¿Y
cómo no iba a serlo si nos lo estamos imaginando?.
A veces, el amor
platónico nos atrapa aunque ya tengamos pareja, y aunque no lo parezca, si lo
sabemos manejar, puede resultar un ingrediente extra que alimente nuestra
relación y la renueve, claro siempre y cuando nuestro fantaseo sea con medida y
no se convierta en un obsesión.
De la misma manera, no
podemos caer en el juego de las comparaciones. Si tenemos pareja, sería injusto
compararlo con alguien que cumple absolutamente todos nuestros sueños que nunca
pelea ni se enoja, nunca se levanta con ojos inflamados y siempre está vestido
como un príncipe; este príncipe azul no es más que un sueño.
Recuerda, a veces la
vida cotidiana y el compartir en pareja puede demostrarte que tu compañero
calza mucho con tu príncipe azul, pero no pidas imposibles, porque puedes
terminar por idealizar al desconocido perfecto y encontrar en ese hombre que te
quiere en la realidad todos los defectos del mundo.
Los amores
platónicos son parte de la imaginación de todo ser humano, simplemente no
pretendas encontrarlos en la vida real, porque la frustración puede ser
demasiada e incluso podrías terminar una valiosa relación.
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