SALUD:
Medicina Natural
El Cerezo de Racimo
Prunus seroti
El cerezo de racimo
pertenece a la familia de las rosáceas, y la parte utilizada es la corteza seca.
Su recolección debe
realizarse en otoño, cuando las plantas están jóvenes. La corteza exterior se
arranca y la interior se pone a secar con mucho cuidado a la sombra. Para
almacenarla, hay que usar un recipiente hermético y debe hacerse a la luz.
Entre las propiedades del
cerezo de racimo podemos mencionar el ser antitusÃgena, expectorante,
astringente, sedante y amargo digestivo.
Además, los
componentes activos que le otorgan esas propiedades son glucósidos
cianogenitos como la prunasina, aceite volátil, cumarinas, galitaninos y la
resina.
Uno de los efectos
más potentes que tiene esta planta es el sedante sobre la tos, por lo que
generalmente se utiliza para tratar la tos irritada, lo que la hace efectiva en
casos de bronquitis y tos ferina. Además, para el control del asma se puede
utilizar en conjunto con otras hierbas.
Si la tos se
elimina, no necesariamente ha sido erradicada la infección, la cual debe ser
tratada mediante otros medios.
De igual forma,
cuando hay digestión lenta, puede emplearse como amargo. Y también, puede usar
en forma de infusión frÃa, como loción para contrarrestar inflamación de los
ojos.
Para preparar la
infusión, se vierte una taza de agua hirviendo sobre una cucharadita de corteza
seca y se deja reposar durante 10 ó 15 minutos. Debe tomarse tres veces al
dÃa. Por otro lado, la tintura se debe tomar tres veces al dÃa en cantidades de
1 y 2 ml.
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