|
PsicologÃa
La
Musicoterapia
(II Parte)
La terapia musical dio resultados cientÃficamente comprobados en el año de 1930, en la ciudad de Nueva York, a partir de ahà se da el siguiente concepto terapéutico:
La acción de la música es una eficaz terapia que actúa sobre el sistema nervioso y en las crisis emocionales, aumentando o disminuyendo las secreciones glandulares, activando (o disminuyendo) la circulación de la sangre y, por consiguiente, regulando la tensión arterial.
La música influye en nuestra mente y en nuestro organismo mediante la creación de emociones. Cualquier pieza musical puede influir ya sea de manera negativa o positiva, tanto puede causarnos depresión, angustia, estrés, ansiedad o ira, como puede relajarnos, causarnos alegrÃa o equilibrio psÃquico. De esta manera, tenemos que la música puede curar daños como desequilibrios nerviosos, influye sobre el corazón y los pulmones, y más allá de cualquier enfermedad, también actúa positivamente sobre casos de alcoholismo, tabaquismo, drogas y hasta la prevención de suicidios.
El principal valor terapéutico de la musicoterapia reside en su influencia sobre las ddistintas emociones. También ejerce efectos sobre el metabolismo, la presión el ppulso y el volumen sanguÃneo, la energÃa muscular, la respiración y las secreciones iiinternas, causando esto distintas posibilidades de emociones y sentimientos ppositivos que pueden acompañar la mejorÃa de la enfermedad.La terapia musical puede utilizarse para despertar la atención y prolongar la duración de la misma, asà como para estimular las facultades de asociación y la potencia imaginativa. Esto se relaciona con la parte cognitiva de la psicologÃa.Según la revista UTOPIA, AÑO 1- N.1 "la música armoniosa configura un lenguaje de emociones que gratifican nuestro ser interior y lo perfeccionan, posibilitando el descanso y la creatividad". En un proceso musicoterapéutico no se busca la genialidad, la buena técnica, o lo estéticamente bello al tocar o explorar un instrumento, la voz o el cuerpo, sino la posibilidad que tiene todo ser humano de expresarse y crear libremente. En el proceso se activan las asociaciones de recuerdos, hechos, realidades y fantasÃas. Se pone de manifiesto el sÃntoma, es decir, la conducta, el sentimiento o el pensamiento que le duele a la persona que ha venido al proceso de la musicoterapia. Las emociones viajan a través de la música que la persona interpreta o escucha, es asà como se da la posibilidad de que la persona pueda dar a conocer y tirar hacia afuera lo que anteriormente habÃa tratado de verbalizar con dificultad. Es importante recordar que el proceso de musicoterapia es diferene e individual en cada caso, ya que la música que a una persona la pueda relajar a otra persona la puede alterar o viceversa, es asà como es necesario individualizar cada proceso. Las personas tienen vivencias únicas con respecto a la música con la que han tenido contacto a través de sus vidas y por eso los sentimientos que evoquen ciertas melodÃas son siempre únicas para cada persona. Por eso se recuerda que la persona que lleve a cabo la musicoterapia debe ser una persona formada con esta especilidad.Se utiliza la música, el sonido y el movimiento como elementos de abordaje a fin de iniciar un proceso de cambio conducente al bienestar personal, a la adaptación social y al crecimiento interno en general. Uno de los motivos más frecuentes por los cuales las personas acuden a un proceso de musicoterapia en el área de la psicologÃa es para el mejoramiento de los estados de ánimo. Según el médico y teraéuta Juan Jose Lopera,: “La música, bien empleada, puede facilitar el contacto con bloqueos emocionales concretos y producir la catarsis necesaria para la resolución-del-conflictoâ€.
"La música proporciona alimento emocional, alegrÃa, felicidad, y la oportunidad de descubrir en nuestro interior, la naturaleza más elevadaâ€
Para más
información puede consultar a:
Verónica Azofeifa
Máster en PsicologÃa ClÃnica
Tels.: (506)241-7661/ (506)355-6474
Más
ArtÃculos
|
