MATERNIDAD
ACTUALIZACIÓN
QUINCENAL (Primer y Tercer Jueves)
¡Hora de Comer!
Los bebés crecen muy
rápido y cuando nos damos cuenta ya andan gateando o incluso caminando por toda
la casa.
En cuestión de un
abrir y cerrar de ojos, el bebé deja el biberón (manila) y deja de mamar. De
pronto, llegó el momento de que empieze a comer sólidos.
Ahora esto es una
transición, no es que de un dÃa para otro el bebé deja la leche y empieza a
comer vegetales y carne.
En la etapa de
dentición es cuando debe empezar a masticar alimentos picados y desmenuzados
como lo que llamamos papilla o colados. Es en este momento que el niño debe
aprender a comer. Para esto es importante acudir al pediatra, quien indicará
los pasos a seguir.
Lo primero será
establecer un horario para las comidas del bebé. Este horario debe seguirse con
toda puntualidad para no dañar el proceso de digestión del niño, y para que
él vaya acostumbrando su organismo a tener hambre en determinado momento.
Después, es
importante recordar que aunque ya él puede sentarse y sostenerse no se debe
dejarlo sólo en la silla, porque se puede caer.
El babero no debe
faltar. Con esta medida se garantiza que no se manche la ropa. Además, es
fundamental que desde el inicio se le empiece a enseñar con toda paciencia a
utilizar sus propios cubiertos. Hay en el mercado muchos modelos que están
especialmente diseñados para sus manitas y para que vaya entrenando sus
moviminetos a la hora de comer. Por
lo general, estos cubiertos no tienen filo y son chatos. Asà no representan
ningún peligro para el bebé.
Con respecto a los
lÃquidos, es clave que no se le den en cualquier vaso, sino que se utilicen
aquellos que sean de plástico flexible para que asà no se le lastimen las
encÃas, ni los dientecitos que vienen saliendo. De hecho, los más
recomendables son lo que lo entrenan a beber, que en algunos paÃses se conocen
como beberitos.
Ahora bien, durante
la hora de comida, repÃtele varias veces el nombre de los cubiertos, del vaso,
del plato, y de todos los utencilios que se encuentran en la mesa, para que vaya
aumentando el vocabulario. De una vez, se aconseja ir explicándole para que
sirve cada uno de esos utencilios.
Para ir preparando la
coordinación de las manitas del bebé, puedes guiarle su mano con la tuya y
asà enseñarle poco a poco la accón de alimentarse. Ve introduciéndolo
también al uso de la servilleta, pues estos hábitos se deben adquirir desde
pequeños.
Otro elemento que hay
que tomar en cuenta a la hora de darle de comer al bebé es la temperatura de
los alimentos. La comida debe estar tibia: ni muy caliente ni muy frÃa, para
que él no rechace la comida por moelstias de este tipo.
Si aún asà hay
rechazo del alimento, no es motivo de preocupación pues es totalmente normal.
El bebé estará iniciando un proceso de descubrimiento y de reconocimiento de
cada comida, tendrá nuevos olores, sabores y colores para escoger, asà como
texturas que le empezarán a ampliar los horizontes del mundo sensorial.
Debido a este
encuentro con el nuevo mundo para experimentar, es que casi seguro el bebé
intentará e insistirá jugar con la comida. Ante esto, no hay que perder el
control ni regañarlo, pues su actitud lúdica es totalmente comprensible.
Más bien, la
reacción ideal es permitirle cierto juego, pero con lÃmites y disiplina para
que él vaya paulatinamente perdiendo el interés en ese juego y a la vez vaya
aprendiendo que los alimentos son para comer y no para jugar. Bajo ningún
punto, se debe regañar al bebé, porque estaremos reprimiendo su sentido de
curiosidad.
En esta etapa, como
durante la mayorÃa del desarrollo del bebé, hay que saber disfrutar cada
situación y cada pasito que va dando el bebé hacia su crecimiento. Ten
paciencia y dedicación, pero sobre todo mucha alegrÃa y disposición para
compartir con tu hijo todos esos momentos tan importantes.
Más
artÃculos
|