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HOGAR: Decoración

Puntos de Partida para el Comedor

   Esta estancia normalmente es una de las más transitadas en nuestros hogares, pues en ella se come, y además en apartamentos o casas pequeñas que no tienen mucho espacio, el comedor hace las veces de oficina, de estudio, e incluso de lugar de reuniones.

   Por eso, es importante que nos detengamos a planear bien su decoración. Primero, hay que analizar la forma que tiene el comedor y el tipo de espacio con que se cuenta. De acuerdo con estos factores, es que podemos definir la decoración y que podemos escoger los muebles.

   De esta manera, si el espacio es rectangular, el ideal es elegir una mesa rectangular también, pero en el caso de que el área sea cuadrada, habrá que decidirse por una mesa cuadrada. Esto es un principio fundamental de decoración del comedor. Si se prefiere la mesa redonda, entonces no hay ningún problema, pues ésta se acomoda en cualquier parte.

   Para colocar la mesa es necesario saber el tamaño del comedor. Si el espacio es grande, podemos poner una mesa larga para ocho personas, y en este caso hacer un comedor como tal, con la mesa centrada. Si más bien, el lugar es pequeño, podemos optar por una mesa redonda para cuatro personas, o la clásica cuadrada y colocarla al lado de la habitación o en un rincón, para poder agregar los muebles que pertenecen a la otra estancia con la que se va a compartir el espacio, sea la cocina, el estudio, o el salón.

   Hoy en día hay muchas opciones en muebles de comedor que solucionan nuestros problemas de espacio. Así, si nuestro hogar es un estudio o un apartamento pequeño, podemos optar por la mesa plegable, que se extiende según se necesite, pero no quita espacio cuando no se está usando. De igual manera, está la mesa corrediza, la cual es una gran idea cuando el comedor debe casi desaparecer. La mesa empotrable es muy funcional, porque se utiliza sólo cuando se requiere. Por último la mesa-desayunador es una de las posibilidades más buscadas para cuando se tiene un pequeño apartamento, y la cocina y el comedor se funden. El resultado es estético y a la vez funcional.

   Si contamos con un poco de espacio libre, lo clásico es que las sillas no se pongan a la mesa, o al menos no todas y se encuentren distribuidas por toda la estancia. La sillas son un mueble fundamental y debe ser bonito, cómodo y útil. Por eso, los diseños con almohadones que se quitan son muy útiles. Si no, puede buscarse un tapiz oscuro y fácil de limpiar, o decidirse por sillas desnudas, en materiales sencillos.

   En la actualidad, la idea que marca las tendencias es la funcionalidad. Por eso, no hay que buscar sillas torneadas, de maderas pesadas y caras que ya no calzan con el ritmo de vida que se lleva en el siglo XXI. La silla es ahora, de madera, pero también de metal, de mimbre o fibras naturales, con o sin brazos, y generalmente con respaldar corto y sencillo. El material se elige según la clase de ambiente que se quiera tener. Si la idea es dar una imagen ultramoderna y futurista, los muebles de metal de estilo minimalista son lo mejor, pero si se busca un lugar acogedor y sencillo, el mimbre o la madera son ideales y si los combinamos con cojines de telas hogareñas el resultado es muy cálido.

   Otro mueble que hay que tomar en cuenta es el aparador. Éste es muy útil, pues acondiciona mucho el espacio. Generalmente, se usa adosado a la pared o como separador de ambientes en los casos en que la habitación sea compartida entre dos zonas, como el salón y el comedor. Un aparador entre cada pieza, da elegancia y un toque especial, sobre todo si se ubica en el la do opuesto de la ventana. El aparador debe guardar en su interior vajillas, vasos, copas, cristalería y adornos que gusten mucho y sean considerados especiales, así como cualquier accesorio del propio comedor como manteles, servilletas, entre otros.

    En fin, como en cualquier cosa, todo depende del gusto y de lo que se quiera hacer en la habitación. Eso sí hay que tratar de que exista una uniformidad de concepto, para que la nota no se rompa, a menos claro que se haya elegido un estilo ecléctico, en cuyo caso vale combinarlo todo pero con mucho estilo.



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