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HOGAR: Mascotas

Mascotas en la Casa

    No sólo los niños son amantes de los animales, hay una cantidad de gente adulta que adora a esos pequeños (y a veces no tan pequeños) seres del reino animal.

    Las mujeres por lo general tenemos ese instinto maternal que nos hace querer tener algo o alguien de quien cuidar, en este caso, de una mascota; pero muchas veces alejamos esa idea porque nos damos cuenta de que no tenemos el espacio o el tiempo necesario para cuidar de ellos o que podrían ser los responsables de un desastre en la casa. Acá te damos algunas ideas de cuáles animales puedes tener sin necesidad de sacrificar tu tiempo y tu tranquilidad.

    Los perros son unos inigualables compañeros, nos brindan protección, ratos agradables y sobre todo alegría. Pero no podemos negarte que también nos brindan más trabajo que otras mascotas. Es cierto que ellos se encariñan con nosotras y viceversa, pero si posees un perrito debes estar atenta de las comidas, el baño, las vacunas y las idas al veterinario. Estos compañeritos son ideales para tenerlos, pero siempre y cuando tengas el tiempo y la paciencia suficiente, porque recuerda que desde pequeños debes enseñarles a no morder las cosas ni a la gente, decirles donde hacer sus necesidades y otras cosas que no se aprenden de un día para otro. 

    Si realmente quieres un perrito y lo quieres con todas tus ganas, toma todo esto en consideración y mejor opta por uno pequeñito que no te dé tanto trabajo y que hasta pueda vivir dentro de tu casa. Los pastores alemanes, golden retrievers, rottweiler y otros de gran tamaño son preciosos, pero necesitan un lugar amplio para poder ejercitar su enorme cuerpo. Entonces mejor compra un french poodle (ahora están los tacita que son pequeñísimos y casi ni crecen), un schnauzer, un pequinés, un cocker y otros que son sumamente tiernos y pueden facilitarte más las cosas.

    Los gatos, aunque dicen que son traicioneros, es cuestión de darles cariño y mantenerlos contentos. Estos pequeños felinos no te dan mucho trabajo y los puedes tener solitos durante períodos largos, esto en caso de que trabajes o estudies. Pero no te olvides de siempre alimentarlos y hacerle mucho cariño cuando estés con él.

    Una buena opción es tener un conejo; nunca molestan, se lavan solitos y sus excrementos son casi inodoros y muy pequeños. Eso sí, lo ideal es que lo tengas en un lugar no muy grande, pero que sea un espacio en donde el conejo tenga la libertad de moverse y ejercitarse. No lo encierres en una jaula, su tamaño no es tan pequeño como para mantenerlo allí y te aseguramos que no estaría del todo contento.

    Los hamsters, cuilos y ratones sí los puedes tener en una jaula, de hecho es ahí donde deben vivir porque son muy pequeños y pueden escaparse, meterse en cualquier parte y brindarte sorpresitas desagradables en todo tu hogar. Lo que puedes hacer es tenerlos en una alambrera bien grande, con una ruedita y demás jueguitos para que también se ejerciten y diviertan.

    Otra opción son los peces, te dan un mínimo de trabajo y son de lo más tranquilo que te puedas imaginar. Tienes que cambiar el agua de la pecera periódicamente y limpiarla lo suficiente como para que el pez no tenga ningún peligro de enfermarse o en el peor de los casos de morirse. Pero fuera de eso y alimentarlos diariamente, un pez es una buena solución.

    También puedes tomar en consideración comprar pericos, loras, canarios o cualquier otro tipo de pajaros. De vez en cuando son un poco escandalosos, pero son lindos y no requieren de mucho tiempo. Debes cambiarle la comida y limpiar la jaulita, pero eso no es problema. La ventaja es que las aves te hacen sentir acompañada y muchas veces, aunque no lo sepas, te suben el ánimo.

    La tortuga es otra excelente opción y son muy tiernas. Necesitan un mínimo de espacio y nunca te darán un dolorcito de cabeza.

    Si eres algo extravagante y te gustan las cosas diferentes; una culebra, una iguana o hasta una tarántula. Nunca debes bañarlas, sí alimentarlas y ¿por qué no? demostrarles cariño.

    Ahora te toca a tí escoger una mascota que se acople a tus necesidades, gustos y limitaciones. Sea cual sea tu decisión, recuerda siempre darles alimento y agua, pero sobre todo darles mucho cariño y un agradable ambiente.



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